Las obras de la variante de Ermua comenzarán en verano, tras adjudicarse ayer
La Diputación Foral de Bizkaia aprobó y anunció ayer la adjudicación definitiva de las obras de la variante de Ermua por un importe total de 67.844.023,06 euros, impuestos incluidos. La obra está dividida en dos tramos según el diseño del proyecto y los trabajos comenzarán este verano. La adjudicación presenta un ahorro de casi 22 millones de euros, con respecto al anterior concurso cuyo coste previsto era entonces de 89,35 millones y fue paralizado en febrero de 2012, antes de comenzarse. La ejecución de cada uno de los tramos tiene su correspondiente contrato. El túnel de Uretamendi está adjudicado a la UTE formada por las empresas Bycam, Mariezcurrena, Asfaltos Olarra y Nortunel, con un precio de 37.779.200,21 euros impuestos incluidos y un plazo de ejecución de 24 meses. El segundo tramo identificado como Beko Erreka lo hará la UTE formada por las empresas Sobrino, Cycasa, Viconsa, Geotunel, por 30.064.822,85 euros, en un plazo de ejecución de 32 meses.
La Variante de Ermua comienza en este término municipal, en la carretera N-634 procedente de Areitio, con la ejecución de una nueva glorieta. Cruzará hacia el sureste el monte Ureta a través de un túnel y discurrirá a cielo abierto por la vaguada del arroyo Beko, ya en municipio de Zaldibar, en paralelo a la autopista AP-8 hasta conectar con la rotonda de San Lorenzo, que forma parte de la variante de Eibar. Un total de 4 kilómetros y 75 metros de recorrido, incluyendo el nuevo enlace con la Autopista AP-8, con la sustitución de las actuales cabinas de peaje. Para salvar el monte Ureta, será necesaria la construcción de un túnel con dos tubos, uno para cada sentido, con una longitud de 589 metros cada uno. Una excavación total en mina de 1.178 metros.
De las once estructuras principales proyectadas, las más importantes son: tres viaductos para el enlace con la AP-8, que suman 336 metros; un paso inferior del ferrocarril en la rotonda de Uretamendi Sur, con una longitud de 86 metros; y los viaductos de Eitzaga, Oterre y Canal, que suman 343 metros. Durante el desarrollo de estas labores se moverán 1 millón de metros cúbicos de tierra y será necesario desviar la vía férrea Bilbao-Donostia.
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