El Consejo de la Infancia inaugura las señales ‘Ermua Ciudad Amiga de la Infancia’

El V Consejo de la Infancia se ha reunido hoy viernes 17 de diciembre en una sesión muy especial que ha tenido lugar en Izarra Centre. Los/as pequeños/as consejeros de los cinco centros escolares del municipio han participado en el acto de inauguración de las señales de tráfico que identifican a Ermua como Ciudad Amiga de la Infancia (CAI) de UNICEF para el periodo 2021-2025.

El presidente del Comité País Vasco de UNICEF, Isidro Elezgarai, y el alcalde de Ermua, Juan Carlos Abascal, han presentado esta reunión del órgano asesor más joven del Ayuntamiento. Durante la sesión, Elezgarai ha contado a los/as participantes las labores que se realizan desde UNICEF para que ningún niño/a se quede atrás y pueda gozar de sus derechos. Por su parte, el alcalde ha subrayado el trabajo que desempeña el Consejo para que el punto de vista de la infancia se tenga en cuenta a la hora de construir y mejorar nuestra localidad.

Tras las presentaciones de Elezgarai y Abascal, los/as niños/as han tenido la oportunidad de firmar con rotuladores la parte trasera de las tres señales de Ciudad Amiga de la Infancia que estarán visibles en las entradas a la localidad. Asimismo, han acompañado a la Brigada municipal en la instalación de la primera de las tres señales, frente a Izarra Centre. Las otras dos se colocarán en las entradas a Ermua desde San Lorenzo y en Okin Zuri.

Reto pendiente: el Día del Juego

Aunque la sesión de este viernes se haya desarrollado en un tono más festivo y de celebración, el V Consejo de la Infancia sigue trabajando duro por completar el reto propuesto para este curso 2021/2022: organizar el Día del Juego en Ermua.

Los/as 32 niños y niñas de 2º y 3º de Educación Primaria que forman el Consejo están colaborando con el grupo impulsor del proyecto Ciudad Amigable con las Personas Mayores para preparar un día dirigido a ciudadanos/as de todas las edades. Y es que el juego reporta muchos beneficios a la comunidad y a nivel personal, y se quiere defender y reivindicar el derecho al juego de toda la ciudadanía. De esta forma, se recuperan espacios de socialización, se favorece la comunicación entre personas de todas las edades y el bienestar personal, permite conocer y adaptarse al mundo que nos rodea, y ayuda a desarrollar los procesos atencionales como la concentración y la memoria.