Ermua Antzokia acoge la representación teatral del clásico 'Farsas y Églogas'

La Compañía Nacional de Teatro Clásico y la compañía Nao D,amores representarán el viernes la obra teatral ‘Farsas y Églogas’, de Lucas Fernández en Ermua Antzokia, a partir de las 22:15 horas. En este montaje participa el actor ermuarra José Vicente Ramos, popularmente conocido con el sobrenombre de "JV", quien lleva varios años afincado en Madrid. El espectáculo está dirigido por Ana Zamora y tiene una duración de 75 minutos. Las entradas cuesta 12 euros y pueden adquirirse en venta anticipada en los cajeros multiservicio de Kutxabank, en su página web www.kutxabank.es. Así como en Lobiano Kulturgunea, de lunes a viernes de 9:00 a 21:00 horas. Y en taquilla hasta antes de iniciarse la función.

Hace ya más de 10 años que el equipo artístico de Nao d´amores trabaja intensamente en la recuperación del repertorio dramático medieval y renacentista, hermano menor del loado teatro del Siglo de Oro. En esta ocasión, y sin perder su identidad artística, lo hacen de la mano de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

El punto de partida para este proyecto conjunto, fue trabajar en torno a la figura de Lucas Fernández (1474- 1541), autor dramático de primerísima categoría que durante siglos ha vivido a la sombra de su rival coetáneo, Juan del Encina, considerado tradicionalmente el patriarca del teatro español.

El punto de partida de la obra ha sido el de la confianza ciega en que los pastores de Lucas Fernández son auténticos. Auténticos en sus juegos y en sus juramentos, sus exclamaciones y sus zamarras… pero sobre todo en sus sentimientos, en sus impulsos, en su espíritu vital. Uno de esos pastores con identidad propia es José Vicente Ramos. ‘JV’ se ha formado en la Escuela de Arte Dramático de Cristina Rota y es actor desde 1986. Ha trabajado en la Compañía Nacional de Teatro Clásico, en Nao D''Amores y en el Teatro Gasteiz, entre otras.

Este espectáculo pretende ser una fiesta, un juego que integra recursos textuales, musicales y escénicos, basados en una dramaturgia construida con extractos de todas las obras conocidas de Lucas Fernández excepto el Auto de la Pasión. Y por encima de todo, un canto a ese Amor que siempre vence en Lucas Fernández (el sacro y el profano), metáfora del camino hacia la luz, del triunfo de la alegría de vivir.