La grada del campo de fútbol estrenará nueva cubierta la temporada próxima

El Instituto Municipal de Deportes (IMD) destinará 89.223 euros (antes de impuestos) para realizar una segunda cubierta en el campo municipal de fútbol Teodoro Zuazua y subsanar las filtraciones de agua y humedades, e incrementar la seguridad para las personas aficionadas mejorando el comportamiento antideslizante del suelo del pasillo central de la grada. El organismo acordó por decisión del Consejo Rector adjudicar las obras en víspera de las fiestas patronales –día 24 de julio- a la empresa guipuzcoana Cubiertas Gutiérrez, S.L. Las obras de construcción comenzarán en esta primera semana de agosto y se espera que finalicen en un mes, de cara a poder disponer de una mejorada infraestructura en el arranque de la temporada futbolística.

La inversión busca solventar las filtraciones de agua desde la cubierta primaria o inicial, solucionando dos de sus principales problemas: el hecho de que el canalón de recogida discurra por el interior de la grada ya que cuando desborda o se perfora vierte el líquido al pasillo interior. Ello reduce su grado de adherencia y lo hace resbaladizo. La fachada exterior de la grada sobresale sobre la cubierta y debido a su actual inclinación retinen los balones que se cuelgan, que deben ser retirados manualmente tras subir a la misma, con el perjuicio de esos accesos, así como su riesgo.

Detalle y características técnicas de la obra

Se descabezará el muro exterior para que no sobresalga, con objeto de que los balones rueden y vuelvan por caída libre. Se mantendrá la cubierta simple inicial y sobre ella se realizará un ‘sándwich insitu’, colocando un aislamiento de 80 milímetros de espesor y otra chapa prelacada de 0.7 milímetros. Y se instalará un nuevo canalón en la parte exterior que recoja y canalice el agua de lluvia. Asimismo se aplicará un tratamiento y un producto que mejore el comportamiento antideslizante del suelo del pasillo superior, y en los accesos se aplicará una base de resina, epoxi y arena para garantizar un índice de resbaladicidad de clase 3. Finalmente instalarán una línea de seguridad o vida y una escalera homologada desmontable para cuando se necesite acceder a la cubierta.