Evolución de los talleres familiares

Muchos negocios familiares nacieron como talleres en los bajos de las viviendas o en pequeños lugares que les permitían trabajar en sectores como las armas, el hierro o, más recientemente, los mecanizados. Sus talleres están estrechamente relacionados con la tradición armera de Ermua y con la producción de piezas para este sector.

La crisis armera del siglo XX trajo consigo unas circunstancias complejas haciendo a los talleres reorientar su producción industrial a través de maquinaria más pesada y con nuevas necesidades, como mayor espacio e infraestructuras para fabricar productos. Además, a partir de la Guerra Civil, muchos talleres no conseguían la licencia correspondiente para producir armas.

Con el paso de los años, algunas fábricas desaparecieron, y otras reorientaron su producción y pasaron a dedicarse al sector de la automoción, como Precicontrol (ZYM). Ciertas empresas no encontraron un sitio adecuado para asentarse en sus lugares de origen y encontraron en Ermua un lugar óptimo para seguir con su producción. Fue el caso de Amaya Tellería (decoletaje y mecanización), que provenía de Elgeta, o Idesa (estampación) y Microdeco (decoletaje de precisión), que vinieron de Eibar. Junto al gran edificio de Amaya Tellería se encontraba un solar en el que se ubicaba la empresa Lomiño, que más tarde cambió su nombre a Lomipower y se dedicaba a la maquinaria y a artículos de cerrajería y ferretería. En 2019, el edificio fue derribado para dar paso a una promoción de viviendas y garajes.